
««Que el tiempo pone a todos en su lugar es una frase de consuelo que suelen pronunciar aquellos que ven que la justicia no llega nunca. Pero mucha atención, no os dejéis engañar por ese tipo de opios semánticos: no necesariamente el tiempo pone a todos en su lugar. Los pone si nosotros hacemos lo necesario para que los ponga en su lugar, no os quepa duda. Si no hacemos nada los pondrá en el mismo lugar que a nosotros: bajo tierra pero sin justicia. No os dejéis arrastrar por creencias irracionales nunca. La verdad por sí sola no basta. Para conseguir justicia hay que actuar correctamente, en todos los sentidos. Siempre. Pero hay que actuar». [Agustín Barahona]

««Muchos franquistas y muchos de sus herederos y simpatizantes no supieron ni saben convivir con las libertades democráticas. Por eso no soportan chistes de dudoso o claro gusto que según ellos «los humillan» y «ensalzan el terrorismo». Quizá entonces habría que aplicar la misma vara de medir jurídica con todos aquellos que se dedican a exaltar el terrorismo instaurado por el golpe de estado de Franco. ¿O es que un chiste malo sobre un franquista es ensalzar el terrorismo y alabar directamente el terrorismo del golpe de estado franquista bajo eufemismos, sin chiste incluso, no lo es?» [Agustín Barahona]

«Simplificando mucho de modo esencial, las personas que a sabiendas actúan incorrectamente buscando de ello beneficios personales suelen actuar buscando su fuerza y eficacia en una unidad colectiva clientelar, mientras que las que son honestas y actúan correctamente sin buscar en ello ningún beneficio personal, ya que sus buenas cualidades no tienen por fin buscar provecho sino ser provechosos, suelen creer más o menos inconscientemente que la sola verdad y honestidad con que viven individualmente sus vidas son suficientes para poder vivir y ser respetados.
Craso error. Si los malos actúan unidos y los buenos como quijotes aislados puede predecirse fácilmente el resultado. El éxito no es sólo cuestión de lógica, sino también de logística.
En un mundo donde los malvados funcionan unidos para pisotear la justicia y someter a la gente buena, o ésta se une inteligente y societariamente para defender y realizar sus valores o de lo contrario por estar en desventaja no tendrá siquiera la más mínima oportunidad.» [Agustín Barahona]