«Necesitamos música de alta calidad para el metabolismo y salud anímicos. Al igual que seleccionamos cuidadosamente los alimentos que ingerimos diariamente para el necesario proceso metabólico que, entre otras funciones, fortalece nuestra salud y previene contra la enfermedad, deberíamos siempre seleccionar la más alta calidad de música diariamente para la adecuada formación ‘metabólica’ de nuestra psique, fortaleciendo así nuestra salud anímica y no enfermando psicológicamente con los transtornos que la música de mala calidad podría producirnos. E igual debe decirse del resto de las artes. ¡Todos los días un clásico, por lo menos!» [Agustín Barahona]

febrero 9, 2014 a las 2:38 pm por Agustín Barahona
Categoría: Humanismo, Musicología, Reflexiones