Origen: ELMUNDO
«Primero: piénsese que los funcionarios sólo pueden comprar hoy con su sueldo más o menos la mitad de lo que con el mismo sueldo podían comprar hace 25 años. Son probablemente el sector que más poder adquisitivo ha perdido en el último cuarto de siglo.
Segundo: con la así llamada «bonanza económica», posterior al empobrecimiento artificial y caprichoso al que previamente nos han sometido, sólo están percibiendo dividendos de la misma los bancos y adláteres del poder, además de éste mismo.
Tercero: la riqueza que generamos quienes trabajamos de verdad –porque quienes la perciben no producen realmente ningún bien, sino todo lo contrario– no se reparte entre todos.
Cuarto: ni siquiera se cumplen las normas que se establecen para que se reparta la bonanza económica producida por quienes trabajamos de verdad –véase el caso de los pensionistas y cómo se los está burlando miserable y descaradamente–.
Quinto: tras tantas mentiras corruptas, lo que prometa este gobierno no vale nada, porque no tiene palabra.
Sexto: aunque subieran incluso el 10% –que no ocurrirá– los funcionarios no recuperarían con eso el poder adquisitivo robado sin ninguna justificación, salvo la de enriquecer a ladrones intermediarios amigos del poder.
Y séptimo: lo único que permitiría confiar en un gobierno, el que sea, sería que hiciera lo que es de justicia hacer; pero eso implicaría que se diezmaran a sí mismos, que se bajasen los sueldos, que se quitasen prebendas y fueros medievales, que se retirasen jubilaciones injustas, que….
¡Que no!, que en el actual sistema, debido a cómo está descaradamente construído, no es posible hacer las cosas bien; y se haga lo que se haga será un puro parche para contentar con «pirulíes» a algunos con la sumisa mentalidad adecuada para aceptarlos.
O se establece un sistema sociopolítico que garantice realmente justicia para todos o cualquier cosa que se diga sólo servirá para aumentar las ganas de conseguirlo y el enojo de no tenerlo ya» [Agustín Barahona]
Tienes que Iniciar Sesión